El diario
Milenio de hoy domingo de resurección, me hace teclear con el húmero derecho fracturado. Imposible dejar de reseñar que "Puntalmente, resucitó el Cristo de Iztapalapa
Con júbilo y algo de desesperación de la gente".
Ya en la frivolidad total no pude dejar el artículo de Guadalupe Loaeza en
Reforma -"En el clóset / Un acto de valor" que, en su carta abierta, comenta
Estimado Ricky Martin:
¡Muchas felicidades por el anuncio que hiciste por medio de Twitter el pasado 29 de marzo! Muchísimos fans tuyos se sorprendieron al leer estas inesperadas palabras: "Hoy ACEPTO MI HOMOSEXUALIDAD como un regalo que me da la vida. ¡Me siento bendecido de ser quien soy!" Sin duda, como te lo imaginabas, fue una noticia que ha tenido una enorme repercusión en muchísimos países. Decidirse a hacer una declaración como la tuya requiere muchísimo valor. No obstante, quiero pensar que te encuentras más tranquilo al percatarte de que, afortunadamente, la gente acepta cada vez con mayor naturalidad la vida de los demás.
De alguna manera, has dejado de ser una víctima de las presiones sociales y de los prejuicios. ¿Te imaginas cuántas personas en el mundo no tienen el privilegio de anunciar su orientación sexual con tanta fortuna como tú? No, muchísimas personas no sólo no tienen esa suerte, sino que además viven en una continua intranquilidad, ya que hay lugares en donde lo peor que le puede pasar a una persona es ser gay y ser pobre. En México se registran en promedio 30 asesinatos por odio contra homosexuales nada más por el hecho de serlo. De éstos, sólo se aclara el 2 por ciento de los casos, porque las autoridades tienen la costumbre de clasificar estos homicidios como "crímenes pasionales". Y eso que sólo me refiero a los crímenes de los que sabemos, ya que naturalmente hay muchísimos casos que no llegan a salir a la luz.
¿Te das cuenta de que un acto de valor como el tuyo ayuda muchísimo a que se respete la dignidad de los homosexuales en general? Muchos actores y compositores se la pasaron toda la vida fingiendo romances con personas del sexo opuesto para no ser juzgados. Tal vez conozcas los casos de Anthony Perkins, Cary Grant o Charles Trenet, quienes sufrieron a causa de que no podían declarar públicamente su homosexualidad.
Ninguno de los artículos tiene pierde.
¡Se los recomiendo ampliamente mientras puedo escribir de corridito!