. . . y aprobar leyes sobre el control a la venta de armas.
En una especie de filebuster, los Demócratas del Senado estadounidense se sientan en el suelo a esperar que algo se apruebe sobre estas armas de alto poder que se venden como pan caliente por doquier en el vecino país de norte.
Como no es cosa de enchílame estas ya mandaron traer sus sleeping bags y sus tortas porque proveen una larga espera.
En una especie de filebuster, los Demócratas del Senado estadounidense se sientan en el suelo a esperar que algo se apruebe sobre estas armas de alto poder que se venden como pan caliente por doquier en el vecino país de norte.
Como no es cosa de enchílame estas ya mandaron traer sus sleeping bags y sus tortas porque proveen una larga espera.