EL GÉNERO CHICO

Ayer por la tarde-noche (como dicen ahora los comentaristas) me dispuse ir a la zarzuela en el Centro de las Artes pese a que un tráfico espeluznante nos impidió llegar a la hora señalada para la función (19:00 hrs.) y, atoradas en Río Churubusco, llegando a eso de las 7:30 largas, dándonos de santos de que no era en Bellas Artes el asunto pues nunca hubiérmos podido entrar.  Allí, las puertas se cierran a la hora que dice el programa y no hay de otra.
Dado que la obra que habríamos de ver era nada más ni nada menos que La Verbena de la Paloma, estábamos resignadas a no ver ni el lío que le arma Julián a su chulapa y Don Hilarión en plena verbena. La obra, como todos los aficionados saben, es cortísima.
Pero hete ahí que a tres cuartas partes del auditorio le había pasado lo mismo y, con buen tino, los organizadores habían decidido esperar a los retrasados.
No obstante, olvidando el tino y, supongo que para desfacer el poco tino de Bretón de haber hecho una obra tan corta, nada mejor que ampliar libreto y música, añadir bailables y hasta la Marcha Real.
Realmente los cantantes eran buenos (salvo la chica que nació en Chiclana) y siempre es un placer recordar la gracia de la obra al llamado de "las cuarenta", y oyendo los reclamos de Julián a la Seña Rita ¨por ser la Virgen de la Paloma, un mantón de la china-na, china-na, te voy a regalar".
Pero, ¿por qué añadir "chuletas"? Nos ponen un preámbulo que nos habla de libreto y música y Julían dice lo que habrá de repetirle a la Seña Rita dentro de la obra. Una chica muy guapa con bonito traje nos regala un baile flamenco (mal braceo y deficiente zapateado pero la bella figura compensa todo).
Cuando la obra termina que, como todos sabemos, es en bronca en que la Susana promete hacer sufrir a Julián  esa noche (pero sólo esa), los productores deciden que tiene que haber beso, perdón y todo lo demás.
Lo de la Marcha Real fue todavía más anacrónico y los que la escucharon con devoción de pié aún más. ¿No se habrán enterado de lo del elefante y Urdangarín?, me pregunto como buena republicana. Bueno, cada quien su vida y su religión me dije pensando en lo que sucede en Medio Oriente y Africa y, por qué no, en el separatismo catalán.
Dicho lo anterior, vale la pena la puesta en escena del Centro de las Artes y el próximo domingo hay dos funciones. Además, después de la desvelada del Grito, seguro que llega rápido.

P.D. Que conste que la ampliación de "La Verbena" ya me había pasado nada menos que en Madrid. También allí decidieron que lo pagado por los boletos merecía darle al público algunos minutos más, supongo que para cumplir con algún reglamento -oficial o de la empresa.

NUEVOS PRESIDENTES

Recuerdo a mi tía María Luisa (Mapisha) que, cuando vivía en Chile tenía un relojero de esos que dicen sabias palabras: "Señorita, le dijo un día, mire usted, el mundo está loco. Que si Oriente, que si Occidente. . . y yo que no me oriento ni me occidento."
En todo el orbe hay -y viene- una nueva camada de presidentes. Con la primavera árabe, el dirigente de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Morsi, es elegido democráticamente, aún cuando se considera la supremacía de los militares egipcios de la época de Mubarak.
En Grecia, la crisis que podría llevar a su separación de la Unión Europea, y tras dos elecciones, el conservador Andonis Samarás se las está viendo moradas para salir adelante.
Putin hace alarde de sus proezas atléticas y encarcela a un grupo punk de chicas (Pussy Riot) que protesta contra él.
Francia tiene en Hollande a un liberal de izquierdas que echa para atrás algunas reformas de Sarkozy que parecían sanas en el largo plazo -hablo de la vuelta a la jubilación a los 60 años- y España sufre a Rajoy que ni se orienta ni se occidenta y hace alarde de sus reuniones con la Merkel.
México tiene por delante la sucesión presidencial en que hasta los jóvenes, que nunca sufrieron la ejemonía del PRI protestan por su retorno y todos desearíamos que de veras fuera un NUEVO PRI como han dicho sus campañas y dudamos de tiempo completo cuando vemos a Emilio Gamboa y Carlos Salinas partir plaza. ¿Peña Nieto meterá a alguien en la cárcel de los muchos que deben estar allí? ¿Podrá hacer algo frente a la inseguridad y el narco?
¿Podrá hacer algo para darnos esperanzas fundadas en el nuevo gobierno?

 

HACE MÁS DE 60 AÑOS

De acuerdo con algún comentarista que recientemente escuché, Jacqueline Kennedy dijo a su marido "Qué gusto que seamos demócratas. Nuestras convenciones son mucho más divertidas que las de los republicanos".

Las cosas han cambiado, pero en el sentido de las convenciones de los partidos del vecino país del norte, la cosa sigue igual. Pocas veces se habló de Mitt Romney en la Convención Republicana que es tan aburrido que ni siquiera sus seguidores lo mencionaron.

 

En contraste, en la Demócrata no se oyeron más que elogios desde los largos e inteligentes de Bill Clinton -que es una pica en Flandes- hasta la de un Diputado cuyo nombre no apunté -lleva todos los años en el Congreso y sufrió las patadas y vejaciones de la era previa a Martin Luther King- el estupendo discurso del gobernador de Masachusetts y el encantador que es Joe Biden, sin olvidar, por supuesto a Michelle Obama.

¿Qué pasará? Quien sabe. Es una moneda en el aire en una sociedad polarizada como todas.