viernes, 10 de abril de 2009

ES ABRIL

. . .y hemos de pagar nuestros impuestos. Yo ya ni me preocupo. Tengo una renta que no me pagan y una pensión del ISSSTE que entrego íntegra a la chica que me ayuda en casa. Los demás gastos inciden desfavorablemente sobre unos ahorros que muy pronto convertirán mi cuenta patrimonial en cuenta corriente (y muy corriente).
No obstante mi situación personal, eso del IETU me indigna. ¿De parte de quién se es empresario cuando no se es? Además, con lo difícil que pagar impuestos ¿cómo o por qué tenemos que hacerlo mensualmente? ¿Es que los únicos que van a tener empleo son los contadores?
Como disfruto de esta Semana Santa en Yautepec y prosigo con las casi 1500 pp. de la vida de Samuel Johnson escrita por Boswell (Oxford University Press, revised edition, 1997) me encuentro con la entrada de Johnson que define al impuesto en su Diccionario: `Excise: A hateful tax levied upon commodities, and adjudged not by the common judges of property, but wretches hired by those to whom Excise is paid.´ (Traduzco sin la elegancia: impuesto: gravamen a las mercancías cuyo monto no se determina por quienes generalmente evalúan la propiedad sino por unos miserables contratados por los que reciben el dinero.)

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